Sergio Gómez – nutricionista ortomolecular
NUESTRO ORGANISMO ES UN TODO. DEJEMOS DE SEPARAR!!!
El pasado fin de semana tuve el honor de dar una ponencia sobre nutrición neuronal en el congreso internacional de @sesap_eu .
Además de mi intervención, quedó patente respaldado por los demás ponentes, que en nuestro organismo no hay sistemas separados sino que, todos los sistemas, los tejidos, células, organelas e incluso la microbiota son un UNO.
El eje intestino cerebro es un sistema de comunicación bi-direccional, es decir, se comunican ambos a través de neurotrasmisores, neuropéptidos y hormonas que regulan el normal funcionamiento de nuestro sistema nervioso.
Por cada 10 comunicaciones entre ellos 9 son de intestino a cerebro y 1 de cerebro a intestino. Todo ello se realiza a través de nuestro par nervioso X, que no es x sino el 10, el famoso nervio vago «que es realmente el que más trabaja». Digamos que esa vía, como dije en la ponencia, es como una red wifi, donde contratamos todos los megas posibles para que haya una mayor fluidez de comunicación y que al mismo tiempo, proteja nuestro sistema neuronal y por ende funcionemos muuuucho mejor. Esta comunicación supone el 80% de dicha comunicación del eje.
El otro 20% se lo dejamos a la circulación sistémica (nuestra sangre). De donde depende sobretodo la absorción intestinal en Intestino Delgado y algunas sustancias que se infiltran desde el colon por la gestión de algunas bacterias.
Ambos sistemas (la sangre y el vago) hacen llegar a nuestra BHE (barrera hematoencefálica) las sustancias que nuestro cerebro necesita para ser nutrido. La BHE de igual forma que nuestra mucosa intestinal en Intestino delgado, sirve de barrera selectiva para absorber nutrientes. Filtra lo que necesitamos únicamente siendo más selectiva que nuestro intestino.
El problema de todo esto, es que ambas barreras selectivas, de un lado y de otro se pueden «estropear» y dejar de ser selectivas; SE VUELVEN HIPERPERMEABLES.
Todo sistema de alimentación debe ir enfocado a cuidar nuestra integridad intestinal porque ello permitirá cuidar de nuestra salud neuronal. Del eje higado-cerebro hablaré en mi próximo post.
